Un viaje por Singapur se siente… así.

Por Sofía Triviño.

Conexiones, experiencias y diversión. Tres palabras que toda persona quiere experimentar cuando viaja; si ves que tu vida no tiene sentido y quieres enriquecerla con experiencias, Singapur es una muy buena opción. Ahora no hablo de Singapur el país, sino la práctica.

El beso de Singapur es una práctica que se basa en movimientos rítmicos y contracciones de los músculos del suelo pélvico, creando una especie de succión en la vagina, similar a la que se podría lograr con la boca pero de manera interna, un juego placentero para quien lo hace y quien recibe. Que se necesita: un pene y una vagina.

Esta práctica nace de las tradiciones milenarias de Asia, aunque su nombre es Singapur, su origen se remonta a China hace más de 6.000 años.  Se cree que las Geishas japonesas practicaban estas técnicas para incrementar el placer, hablamos de un viaje que lleva experiencias, conexiones ancestrales y creatividad, con múltiples beneficios para la pareja, las contracciones vaginales ayudan a mejorar la lubricación, dándole una mayor apertura a la vagina para experimentar orgasmos más intensos, haciendo que la excitación sea lenta que deriva en más resistencia con una presión en el pene que estalla en placer.

Y, ¿cómo se hace? Las posibilidades son infinitas, pero, para iniciar podrías ser de la siguiente manera: siéntate sobre tu pareja, la clave está en el movimiento aprieta, mantén la contracción unos segundos y relaja, puedes adicionar un leve movimiento de caderas, entre más suave y lento te muevas más excitación van a sentir, acompáñalo de besos, susurros, jadeos, palabras (si es que les gusta) y todo aquello que les sugiera la imaginación, es importante que ambos disfruten de la experiencia y se comuniquen sus sensaciones.

Si a la primera no la logras take it easy (tómalo con calma) insistir y practicar será tu aliado, estás contracciones no son tan sencillas de hacer, sin embargo puedes tener ayudas como: las bolas chinas, un lubricante neutro y los ejercicios kegel, tus mejores amigos, este trio maravilla te ayudará a fortalecer el piso pélvico y que de manera progresiva puedas implementar esta práctica a tu vida.

Las bolas que necesitas para implementar a tu vida, están aquí

Aunque crean que es un trabajo netamente femenino, les aseguro que el sexo al ser una práctica compartida, demanda comunicación, creatividad y confianza, el mejor regalo no siempre son unas rosas y un vino, puede ser una experiencia en pareja que los hará conocerse más. Pero chicas si quieren ponerse divertidas impleméntenlo, que sea su factor sorpresa durante la relación, el ser dinámicas también aplica para fortalecer los encuentros con quienes compartimos la cama.

Considero que Singapur ya nos gusta más con esta información.