Nunca he tenido un orgasmo. Disfruto del sexo pero nunca he podido llegar o sentir eso de lo que hablan mis amigas. Tuve que fingir porque no me gustaba nada de lo que hacia; frases así se escuchan por montones en las platicas femeninas, y es que el sexo se ha convertido en una especie de presión por quien lleva el mando y quién hace venir a quién hacemos de todo que se nos olvida que la funcion principal es divertirse.
Aunque se tenga la creencia de que es difícil hacer venir a una mujer o que eso del orgasmo es una vez en la vida y no con todo el mundo, existe todo un desconocimiento histórico que ha hecho que por años las mujeres crean que si no sienten un orgasmo por penetración es porque son frígidas o hay algo malo con ellas, corrientes que terminaron por hacer de la intimidad algo complicado. A tal punto que encerraron el placer en un concepto tradicional, un pene que genera una acción directa, penetrar, y si no ocurre la famosa explosión, es porque la culpa es de ella. Frente a esa situación te presentamos a tu aliado número uno, el clítoris, un órgano que a simple vista es pequeño y algo subestimado, pero que abarca una sensibilidad estimada en 8.000 terminaciones nerviosas que proporcionan placer.
Entonces si quieres resolver el enigma de porqué las mujeres no llegan a un orgasmo, es porque falta estimulación, no es encontrando el abecedario en las posiciones o implementando un ritmo de caderas exorbitante, porque la realidad es que más del 70% de las mujeres no tienen un orgasmo por penetración y eso es un hecho; el clítoris es un órgano de estimulación directa y para hacer que vibre puedes apoyarte con juguetes, lubricantes y porque no, tu lengua y dedos. Algunas personas creen que los orgasmos deben estar restringidos solamente al sexo, sin llegar a experimentarlos de manera autónoma con la masturbación (1) la autoestimulación abarca diferentes maneras de entender el cuerpo y la manera en que sentimos placer, nos permite conocernos y tener un espectro más amplio de lo que nos gusta y lo que queremos evocar con la creatividad en nosotros mismos.
Un orgasmo es fantástico, pero sentir presión para tener uno hace que sea un momento estresante y molesto, es por eso que muchas veces se opta por fingir, porque hay demasiada presión y no se tocan los puntos exactos entre esos tener una conversación sobre porque no involucramos el clítoris en nuestro juego. Lo que puedes hacer es preguntar y apoyarte en el clítoris, utiliza herramientas que te ayuden a generar la sinergia sexual que necesitas para complacer y satisfacer a tu pareja y en caso de que no la tengas pues manos a la obra contigo misma, tómate tu tiempo y anímate a experimentar, juega con el entorno en el que estás, familiarízate con tu clítoris y tocalo, te aseguro que no te vas arrepentir.
